11 junio, 2008

Tu no tienes 'ná' (La informática como propiedad virtual) I

Esto, que en principio se plantea como una explicación de mis ausencias de los últimos tiempos, es también -inevitablemente- una diatriba contra los rumbos más recientes del negocio informático.

De entrada, mis disculpas para quienes no entiendan el lenguaje más o menos técnico que tengo necesariamente que emplear. De salida, algunas recomendaciones previas para compradores y usuarios de informática (software y hardware porque ambos son cómplices): medite la compra de un ordenador tanto (o más) como una decisión matrimonial; revise sus convicciones de que lo caro es bueno, sin sustituirlas por las contrarias; exija el disco de instalación del sistema operativo y también que le desinstalen los programas 'a prueba' preinstalados; si tiene conocimientos sólidos de informática, o un buen amigo o pariente cercano que los tenga, opte con su consejo por un ordenador a medida, con la placa base, el procesador, la memoria y el disco duro que prefiera, opción que aún ofrecen algunos vendedores.

Si opta por un ordenador de marca, espere un mínimo de seis meses desde su aparición en el mercado para comprarlo y haga entonces una búsqueda del modelo en Google. Tal vez decida finalmente no adquirirlo. En cualquier caso, exija el mayor detalle posible sobre todos sus elementos principales (placa base, mucho más importante de lo que parece; disco duro; memoria RAM y sólo en último término el procesador). Cerciorese de que no se lleva a casa un enemigo. Revise los contratos de garantía y asistencia con lupa (a veces es literalmente necesario). Finalmente, si es creyente rece todo lo que sepa.


Michael Dell, otro 'chico listo' made in USA.

Hace muchos años -empiezo a pensar que demasiados- que lidio con la informática, tanto en mi trabajo como en mi casa o en mi estudio. Al día de hoy, descontando el que 'me ayuda' a ganarme el pan, tengo cinco ordenadores, pero he de matizar que uno está muerto, otro (un Pentium 3) es manifiestamente obsoleto y un tercero guarda en las entrañas de su disco duro, ahora inaccesible, algunos de los programas más caros y de los documentos más queridos, entre ellos todos los posts de mis blogs.

Ciertamente, la última catástrofe (la muerte de mi ordenador doméstico) no me cogió desprevenido. Seis meses antes de su fallecimiento había realizado un backup completo. Tras hacer comprobaciones exhaustivas para certificar sin lugar a dudas el deceso, me traje del estudio a casa un Dell Dimension 9200 comprado en septiembre de 2006 con el hipotético destino de ser destinado al trabajo con vídeo y que no había tenido mayor uso desde entonces, por falta de tiempo, que la instalación de un tarjeta Firewire para la adquisición de vídeo y unos cuantos programas (legales y nada baratos).

Ese y el encendido esporádico para cerciorarme de que funcionaba había sido todo el 'desgaste' que había sufrido el flamante Dell, al que volqué el backup del difunto (sólo programas y documentos, preciso). Tras algunos días de funcionamiento normal y de relax espiritual y físico para mi empezó a dar problemas, con una deprimente proliferación de pantallas azules que nada aclaraban sobre las causas. Finalmente dejó de arrancar, argumentando que faltaba o se había corrompido un archivo llamado 'hal.dll', nombre de mal augurio que me hiizo evocar al siniestro ordenador protagonista de cierta odisea espacial. Era preciso reinstalar ese archivo.

Intentaré hacer el cuento (en ralidad tragedia porque, con los parámetros dados, el destino estaba escrito) lo más corto posible. Tras comprobar que los estúpidos de Dell habían decidido dar al disco duro (Western Digital, 320 Gb, 7.200 rpm, según especificaciones de fábrica) un formato Raid 0 so pretexto de hacerlo más rápido, tuve que enfrentarme a la BIOS más absurda que he encontrado hasta la fecha. Si no existiera tendría la misma utilidad: ninguna. Una búsqueda exhaustiva con Google me permitió documentar el montón de problemas que los usuarios tenían -y tendrán- con este puñetero ordenador, el inexplicable formato Raid 0 y la estúpida BIOS.

De entrada, para poder utilizar la consola de recuperación de Windows (denominación más bien eufemística) fue preciso cambiar el disco duro en la BIOS de Raid 0 a simple SATA. Así, tras no pocos ensayos estériles, logré visionar el disco duro utilizando comandos (quién lo iba a decir) del viejo DOS, el sistema operativo que hizo la fortuna de Bill Gates. Resulta que además de la habitual (C) había otras dos particiones, denominadas I y J (las letras entre D e I están asignadas a los lectores de tarjetas, otra milonga). La unidad I, que al parecer debería funcionar, entre otras cosas, a modo de 'disketera' interna, de la que el sistema carece, se había ido al carajo y era irrecuperable, según certificó un análisis con el comando del DOS Chkdsk.

Por dos veces instalé un disco duro SATA e intenté cargar Windows XP en él con la ingenua intención de copiar los archivos del disco Raid 0. Fue inútil. Llegado un momento de la instalación del sistema operativo ésta se detenía por un supuesto error en un dispositivo de E/S (entrada/salida). Y subrayo 'supuesto' porque tanto el disco duro SATA como el CD del ordenador funcionaban sin problemas. Todo indica que la 'ingeniosa' BIOS de los 'ingenieros' de Dell es algo así como la carabina de Ambrosio, o bien, que sin advertencia expresa, predetermina que sólo se pueden utilizar discos Raid 0 o que estos -aunque no se carguen en la BIOS- no pueden coexistir con otros formatos.

En definitiva, el usuario, por grandes que sean sus conocimientos y empeños, queda a merced del servicio de asistencia (de pago, claro) de Dell. He preguntado cómo funciona y me han dicho que, en un caso como el mío, acaba remitiéndo a algún servicio de asistencia local, aparentemente no vinculado a la multinacional estadounidense, lo cual no es precisamente una garantía de nada. En cualquier caso, me tienen agarrado por salva sea la parte, así que cuando se me pase el berrinche llamaré a un 902 de nuestros pesares y asumiré las consecuencias crueles de los signos de los tiempos: la indefensión y el abuso.

El sábado pasado, exhausto y cabreado tras mi último intento de recuperar el disco duro del Dell, me arranqúe hacia PC City y me traje a casa un Acer Aspire 3610, con Windows Vista preinstalado y sin disco de instalación (por lo visto es la última moda), 3Gb de RAM y un disco duro de 250 Gb. Casi la cuarta parte de lo pagado lo es por un contrato de 'asistencia' que da derecho a un chequeo anual (¡). Temo que puede haber sido otra mala idea, como la compra del Dell. De momento, me ha jubilado el scanner (HP), que no tiene drivers para Vista (*) y algo feo le ha hecho a mi pendrive, que desde que lo conecté ha dejado de funcionar. Tampoco hay drivers para Vista de mi disco duro externo Fujitsu Handy Drive, que guarda algunos de mis programas de instalación comprados online. Hay que vender, vender, vender. Pese a quien pese y caiga quien caiga.

Para colmo ya me ha dado dos pantallazos azules en el momento de apagar, lo que me ha llevado a optar por 'suspender' en lugar de apagar, decisión que habré de revisar tan pronto como pueda. Cada vez que lo enciendo cruzo los dedos y maldigo a Murphy, cuyas leyes son de especial aplicación a la informática que nos posée.

(*) No me rindo con facilidad, así que días más tarde emprendí una exhaustiva búsqueda en Google. Suponía razonablemente que compartía mi problema con miles de personas en todo el mundo y esperaba que alguno hubiera dado con una solución. Y así era. Mi scanner es un Scanjet 4300C, pero imagino que esta solución puede servir para otros modelos e incluso para otro tipo de hardware cuyos fabricantes han tenido la desvergüenza de precipitar la obsolescencia de sus productos negándose a actualizar los drivers.

El procedimiento es tan simple que seguramente dificulta la posibilidad de que a alguien se le ocurra intentarlo. Bájese los drivers de su modelo. En el caso de mi scanner, el ejecutable es sj657en.exe. Póngalo en marcha con un doble clic. Luego trasládese, mediante el Explorador de Windows al directorio 'Hewlett Packard' en la carpeta 'Archivos de Programa'. Vaya a la carpeta 'HP Precission Scan' y abra en su interior la carpeta 'Precision Scan LTX'.

Dentro de esa carpeta debe hacer esta operación en cada archivo 'exe': abra 'Propiedades' pulsando con el botón derecho; pulse la pestaña 'Compatibilidad' y marque la opción 'Ejecutar este programa en modo de compatibilidad para... Seleccióne Windows XP (Service Pack 2). Cuando haya terminado el proceso en todos los 'exe' conecte el scanner y pruebelo. ¡Funciona!

La próxima vez que arranque Vista le notificará que ha detenido la carga del archivo 'hpupdate.exe' en el inicio. Vaya al Panel de Control y luego, sucesivamente a Herramientos Admnistrativas y Configuración del Sistema. Pulse la pestañá Inicio de Windows y desmarque el archivo incordiante.

Ahora, ya en modo recochineo, diríjase a http://hp.com. Busque el software para su scaner con Vista y cuando aparezca esta leyenda...

If you are using the Windows Vista operating system on your computer, please consider upgrading to a newer HP product that is supported on Windows Vista. HP has numerous products on the market that support Windows Vista.

... suelte una sonora carcajada y haga un corte de mangas. Relaja mucho. Shame on you, HP!

Continuará.

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